miércoles, 29 de abril de 2015

MIS 24 AÑOS Y LA RUMBA FUSIÓN


La toma del pulso de la citi cuando hablaba de irme a vivir a Barcelona y vivía en Perú y bailaba rumba fusión y rumba callejera y hablaba de eso con aquella mujer treintina cuando yo tenia 23...lo recuerdo y era bello, era bello hablar de irse. Paro ahora y pienso en mi edad 23 que era una buena edad para irse a vivir a Barcelona y luego todo sigue, los bares de la calle Estación por los que salía y bebía vino blanco y tinto, aquellos bares cutres de la calle Estación cuando con 23 salía con la treintina mujer con la que hice unos talleres de arte, poesía y cinematografía...(lo que luego me animó a estudiar cinematografía en Madrid)no me encontraba joven y luego cumplí los 24 y conocí otra mujer que me gustaba más que la treintina, también era mayor que yo...y durante un tiempo estuve saliendo con las dos, eso duró un periodo de doce meses… cuando yo tuve 24 murieron mis abuelos, entré en la universidad y publique un libro de poesía. Quizás fueron los mejores años de mi vida y no me di cuenta, quizás. Y cuando tenía yo 24 años aquellos eran buenos años eran muy buenos años los que yo disfruté cuando yo tenía cuatro años pero era muy buenos años los que yo disfruté cuando yo tenía 24 años de los cuatro años sólo recuerdo que era feliz… INE no había a los 24 años y lo recuerdo todo… esos 24 años en los que yo empecé a fumar hachís, yo empecé a fumar hachís con 24 años y la vida se volvió de un color maravilloso, disfruté realmente la vida intensamente con mis primeras fumadas de hachís y luego las convertí en mis primeras fumadas de marihuana… al mismo tiempo no había dejado el alcohol… estaba en la universidad allá en el viejo Perú estudiando Filología Hispánica y tenía buenos amigos con los que salía divertirme al mismo tiempo salía con dos chicas que eran mayores que yo siempre por turnos… lo tenía todo: salud juventud, belleza y talento… sobre todo tenía talento un talento que me llevó a ser premio regional de poesía y no sólo eso también escribía cosas que luego formaron un libro de relatos que me publicaron… estaba feliz en la universidad y estaba feliz con las dos chicas con las que salía y estaba feliz fumando porros, fumando marihuana y mi vida era divertirme y acudir a la universidad sólo para demostrar mi talento… talento belleza, juventud, todo lo tenía… pero lo que más echo de menos no es mi juventud ni mi belleza… echo de menos el gran talento que tenía… grandes dones literarios que eran míos y yo en la edad de 24 años no sé lo que pudo suceder ni qué fue lo que volcó mi camino porque me hice una persona con menos arrojo y menos fuerza vital tal vez fue que mi talento antes del Facebook con el humo del hachís… mi talento que se disipó con el humo, tal vez fue eso lo que sucedió...AL MENOS ME QUEDÓ LA RUMBA CALLEJERA


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